Decidir VS Postergar

“Ya lo haré”; “Seguro que con el tiempo la cosa mejora”; “El tiempo lo cura todo”…

¿Os suenan estas frases hechas? Resulta que nos engañamos a nosotros mismos postergando, dejamos para más adelante decisiones que podríamos llevar a cabo ahora, pero ¿por qué?

-       Por miedo a hacerlo “mal”.

-       Proteger mi autoconcepto.

-       Evitar situaciones incómodas.

-       Librarnos de responsabilidades.

Actuar y tomar decisiones implica esfuerzo, riesgo, cambio, adaptación, superación de adversidades, asumir consecuencias buenas y menos buenas, salir de nuestra “zona de confort” tan cómoda, CRECIMIENTO.

De aquí surgen los críticos, aquellas personas que observan y no hacen, que critican lo que hace el otro ya que es más fácil que actuar, porque tomar decisiones no es sencillo. No hagas caso a los críticos y conviértete en actor, protagoniza de tu vida.

Estamos en un mundo nada aburrido, donde hay gente que sí decide aburrirse. Cuando decides dejar pasar el tiempo, estás postergando tu vida, malgastando el presente. Recuerda, tú decides siempre...

¿Te suenan las siguientes situaciones? :

-       Conformarse con una relación de pareja cuando las cosas no van bien y esperar a que se arreglen solas.

-       Dejar de fumar cuando uno esté más relajado.

-       No moverte de tu zona de confort por miedo (no salir de tu ciudad de origen por miedo a no adaptarte; no ampliar tu red social por miedo a conocer gente nueva y diferente a ti…).

-       No ir al médico por no enfrentarte a tus sospechas de una posible enfermedad.

Si quieres dejar de fumar por ejemplo, hazlo (no estoy diciendo que sea fácil), estás sustituyendo la ansiedad de hacerlo, la ansiedad por el futuro, por la actuación en el presente, y exponiéndote a dicha ansiedad, ésta se verá rebajada.

No dejes que la ansiedad te invada y te paralice, si quieres cambiar, ¡hazlo!, si quieres crecer, ¡hazlo!, si quieres actuar ¡hazlo!, no lo aplaces porque ¿qué es lo peor que podría pasar? 

Como digo siempre, no resulta malsano postergar decisiones y actuaciones siempre que así lo decidas tú y quieras llevar de tal forma tu vida, resulta malsano y angustiante cuando  evitas tomar decisiones por miedo a fracasar, por la ansiedad que te pueda generar dicha decisión, por la falta de aprobación de terceros, por evitar problemas o dificultades aun queriendo cambiar tu rumbo, tu forma de estar y vivir en él.

No postergues tu felicidad en definitiva, no dejes pasar tu vida siendo un mero observador de ésta si realmente quieres ser el actor principal.