El lunes acudí a la JORNADA SOBRE PSICOLOGÍA CLÍNICA EN ATENCIÓN PRIMARIA, patrocinada por la Fundación Mutua Madrileña, y fue realmente inspirador.
Se trataron temas que creo que deberían ser la columna vertebral de cualquier práctica psicológica, y psicólogo, en el día a día, y nosotros tenemos la responsabilidad de que lleguen a la población ciertos conceptos que hoy, a muchos, les extraña.
La salud es un todo que incluye salud física y salud psíquica. La primera parece más obvia. La segunda parece no estar en la conciencia de la población y de muchos de los médicos. Y la realidad es que psicología es parte de la salud, y, diariamente, influye en el 76% de los problemas menores que acuden a la atención primaria, de los cuales 30-50% están directamente relacionados.
Nuestro trabajo principal, como psicólogos, es ayudar a las personas que lo necesitan, y esta ayuda no se debe quedar en la "terapia psicológica", sino que, al igual que en otros ámbitos de la sanidad, debemos dedicarnos a la detección, prevención, diagnóstico precoz, tratamiento y rehabilitación, para así poder abordar, aportar y colaborar en la mejora de la salud mental y psíquica de la población.
Ser psicólogo debería significar profesionalidad y compromiso social, lo que se traduce en ser útil y eficaz. Nos debemos a la autocrítica y al ansia de superación, pues lo que tenemos entre manos es lo más valioso que existe: personas.
En la actualidad el tratamiento psicológico se hace poco, tarde y caro. Mi meta como profesional es conseguir cambiar esto: que el tratamiento sea pronto, todo lo que se necesite y muy accesible.
Y todo esto lo estoy plasmando diariamente en mi gran proyecto:
Se trataron temas que creo que deberían ser la columna vertebral de cualquier práctica psicológica, y psicólogo, en el día a día, y nosotros tenemos la responsabilidad de que lleguen a la población ciertos conceptos que hoy, a muchos, les extraña.
La salud es un todo que incluye salud física y salud psíquica. La primera parece más obvia. La segunda parece no estar en la conciencia de la población y de muchos de los médicos. Y la realidad es que psicología es parte de la salud, y, diariamente, influye en el 76% de los problemas menores que acuden a la atención primaria, de los cuales 30-50% están directamente relacionados.
Nuestro trabajo principal, como psicólogos, es ayudar a las personas que lo necesitan, y esta ayuda no se debe quedar en la "terapia psicológica", sino que, al igual que en otros ámbitos de la sanidad, debemos dedicarnos a la detección, prevención, diagnóstico precoz, tratamiento y rehabilitación, para así poder abordar, aportar y colaborar en la mejora de la salud mental y psíquica de la población.
Ser psicólogo debería significar profesionalidad y compromiso social, lo que se traduce en ser útil y eficaz. Nos debemos a la autocrítica y al ansia de superación, pues lo que tenemos entre manos es lo más valioso que existe: personas.
En la actualidad el tratamiento psicológico se hace poco, tarde y caro. Mi meta como profesional es conseguir cambiar esto: que el tratamiento sea pronto, todo lo que se necesite y muy accesible.
Y todo esto lo estoy plasmando diariamente en mi gran proyecto:
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