Comprar regalos se me va de las manos

Ahora Navidad, es una época en la que compramos regalos a todos nuestros familiares y amigos, poniendo en ello toda nuestra mejor intención y cariño. Pero al mismo tiempo, podemos llegar al límite del descontrol, pasándonos de nuestro presupuesto y sufriendo unas caras consecuencias, nunca mejor dicho.

Los centros comerciales, muy proclives en nuestra época, incitan al consumismo; al igual que las luces navideñas, las calles peatonales, los horarios extendidos de las tiendas... Etc. El consumismo, en si, no es malo. Pero si no controlamos nuestro bolsillo y nuestros impulsos podemos dejarnos caer en el despilfarro, con lo que ello conlleva: sentimientos de culpabilidad, situaciones económicamente complicadas, frustración, enfado con nosotros mismos, ansiedad …

Para evitar todo esto, y disfrutar comprando nuestros regalos de Navidad, sólo hay que seguir estos sencillos principios:

• Debemos hacer una lista con los nombres de todas aquellas personas a las que queremos comprar un regalo.
• Debemos elegir un regalo para cada una de ellas, antes de salir a comprar. Para ello, podemos añadirlo a la lista que anteriormente hemos hecho con sus nombres. Podemos buscar ideas en catálogos, Internet… así también nos haremos una idea de cuánto nos puede costar cada regalo, apuntando también su precio aproximado.
• Una vez tengamos la lista completa, comprobaremos que se ajusta a nuestro presupuesto. Si no es así, buscaremos alternativas a los regalos ya propuestos, cambiándolos por otros o simplemente buscando tiendas en las que encontramos esos regalos o muy parecidos a un precio más bajo.
• Detengámonos un presupuesto cerrado, decidiremos que día o días vamos a usar para buscarlos y a que centros o tiendas vamos a ir.
• Cuando vayamos a comprar los regalos, llevaremos en efectivo lo que hemos decidido que nos vamos a gastar. Así evitaremos tentaciones de comprar cosas que no tuviéramos en la lista y seremos más conscientes del dinero que nos estamos gastando, de que las tarjetas son muy engañosas.

Comprar regalos para nuestros seres queridos es una actividad muy gratificante, divertida y estimulante. Pero no tiene que afectar excesivamente a nuestro bolsillo. Para ello vamos a ser uso de nuestra creatividad e imaginación. además de comprar regalos no debería ser algo obligatorio, sino que debería ser un acto que no salga de dentro y sólo para aquellas personas que de verdad queremos regalarles algo. Los regalos no tienen por qué ser caros, su valor no es monetario, sino que deben ser detalles pensados para la persona que los va a recibir.

Espero que este Consejo os sirva de ayuda. Os deseo muy felices fiestas y que os lo pases muy bien.